Mons. Canecín, en ambas oportunidades, presidió la misa y compartió la mesa con los residentes de los dos centros.
El obispo de Santo Tomé se refirió al Niño como iluminador de nuestras vidas y como artífice de unidad.
El obispo de Posadas expresó su deseo de "que lo importante sea lo importante: el amor de Dios que quiso nacer en medio nuestro, hacerse uno de nosotros"
El administrador apostólico de San Rafael, monseñor Domínguez animó a hacer feliz la Navidad