El obispo señaló que Jesús está en los detalles, al pedir "denle de comer". "Tan sensible es el Señor a estas cosas pequeñas y que son, en nuestra vida, tan cotidianas y tan necesarias", destacó.
El arzobispo de San Juan afirmó que "lo hacemos porque tenemos certeza de ser escuchados por Él", y destacó: "Cada persona posee un modo de orar según su propia historia, formación, sensibilidad".
El arzobispo afirmó que "el mundo necesita recuperar el valor de la fe", la cual estaría inmersa "en un tironeo entre las múltiples formas del materialismo, condimentado con la soberbia de la vida".
El administrador apostólico de Mar del Plata se refirió a los "falsos profetas con piel de ovejas, que por dentro son lobos rapaces: hoy te proponen una vida feliz y después te dejan sin nada".