El obispo de Mar del Plata se refirió a la parábola del rico y el pobre Lázaro que "nos insiste en la necesidad de abrirnos al pobre y al sufriente, a los más necesitados y vulnerables", dijo.
El obispo de Mar del Plata invitó a reflexionar sobre tres puntos relacionados al compromiso que todo cristiano debe tener en su vida cotidiana y en sintonía con los valores del Evangelio.
El obispo de Mar del Plata se refirió a la humildad y la gratitud como el camino más claro "para encontrar el lugar, el puesto, el sitio, el 'asiento' en el banquete, en la vida".
El obispo diocesano, monseñor Gabriel Antonio Mestre, los alentó a "tomar la vida como viene y hacer todo el bien posible".