Los combonianos polacos decidieron asilar a los que huyen de Ucrania, para quienes abrieron sus 2 casas en Cracovia y Varsovia".
El arzobispo católico de Westminster y el arzobispo anglicano de Canterbury, criticaron en sus homilías de Pascua la medida del gobierno que prevé deportar a Ruanda a cientos de solicitantes de asilo.
Los obispos de la zona no han dejado de denunciar la tragedia poniendo todos los medios a su disposición para ayudar a los desplazados.
El jefe de la Iglesia ortodoxa de Constantinopla, de visita en Polonia, se reunió con el presidente del episcopado local y luego juntos abrazaron a los refugiados que huyen de la guerra.