"No a la violencia, venga de donde venga! ¡No más muertes!", es la exhortación de los obispos del altiplano, preocupados por los actos de violencia durante las protestas en el sur del Perú.
"Necesitamos un cambio de rumbo decisivo, ¡queremos la paz!", exhortaron los obispos peruanos en un comunicado en el que ofrecen su servicio "para mediar y tender puentes".
"No permitamos que el Perú sea destruido por nuestras acciones o caiga en un abismo institucional", expresaron en un comunicado.
La Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) se pronunció el 8 de enero sobre los actos antidemocráticos mediante los que se invadieron y destruyeron edificios públicos en Brasilia.