En sus mensajes, los prelados destacaron la necesidad de anunciar el Evangelio y ser misioneros del amor de Cristo, llevando alegría y trabajando por la fraternidad.
La obra del Pbro. José María Recondo profundiza sobre cómo aprender a vivir la esperanza en los tiempos de hoy y sobre cómo conciliar la esperanza y el sufrimiento.
El obispo invitó a mirar al Niño: "No el de yeso. El Niño que cada día nace en el mundo como expresión de que Dios no se olvida de los hombres y de que Jesús está con nosotros y es nuestra esperanza".
En su reflexión semanal, el obispo de San Francisco asegura que allí donde el cristianismo echa raíces se convierte en motor de esperanza, porque la fe en Jesús hace mirar hacia delante.