En su sermón de Cuaresma a la Curia Vaticana, el predicador pontificio comentó también las palabras de Jesús: "Yo soy el buen pastor" (Juan 10:11).
En una multitudinaria misa celebrada en el centro de Budapest este domingo, Francisco exhortó a ser "como Jesús, una puerta abierta que nunca se cierra en la cara de nadie".
El obispo de San Isidro invitó a rezar por las nuevas vocaciones y por los pastores, "cuya vocación es animar a todo el pueblo de Dios a que sea evangelizador y misionero".
El arzobispo de Córdoba presidió la Jornada de Oración por las Vocaciones, en la que recordó: "Cuando acogemos esa mirada toda nuestra vida cambia, hay un diálogo vocacional entre el Señor y nosotros"