El arzobispo porteño subrayó una de las primeras frases del pontífice: "Tenemos que buscar juntos cómo ser una Iglesia misionera, que construye puentes de diálogo.
Fue en la iglesia de los capuchinos y presidió Mons. Alejandro Musolino. El obispo auxiliar llamó a no tener miedo, a abrir el corazón y a dejarse acompañar en el discernimiento de la vocación.
El arzobispo recordó que la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones es "una oportunidad para rezar por quienes sienten en su corazón la opción de vida al sacerdocio y a la vida consagrada".
El arzobispo de San Juan contó una historia de un grupo de amigos que se pierden en un bosque, para recordar que "Jesús es nuestro Buen Pastor. Él nos busca cuando no encontramos una salida".