Los integrantes dieron a conocer un documento sobre la realidad que los convoca y analizaron aspectos sociales en general.
En el 13° domingo durante el año, el obispo de Mar del Plata animó a resignificar "nuestro seguimiento de Cristo para ser verdaderos discípulos misioneros".
El obispo de Mar del Plata invitó a reflexionar, como en un eco del Jueves Santo, sobre el misterio de la "presencia real del Señor como pan vivo bajado del cielo".
En el domingo de Pentecostés, el obispo de Mar del Plata reflexionó con tres puntitos sobre la importancia de permitir obrar al Espíritu Santo en "nuestra vida de discípulos misioneros".