Población en fuga, sanidad en colapso. Los religiosos encerrados dentro del hospital "por miedo a que los ataquen". La violencia de las bandas armadas expulsó a unas 53.000 personas de la capital.
Los delincuentes incendiaron la sala de informática y saquearon la biblioteca del centro formativo. Además, varios vehículos quedaron calcinados.
Organizaciones de la Iglesia expresan solidaridad con el pueblo haitiano y piden a Dios "disponga los corazones, mueva voluntades, para que nuestros hermanos puedan gozar pronto de una vida plena".
Este domingo, el Papa manifestó su "alivio" por la liberación de cuatro de los seis religiosos capturados y pidió que los restantes "sean liberados lo antes posible".