"Tenemos la posibilidad de recibir de la Palabra y de los sacramentos esa salvación que nos trae Jesucristo. No la desaprovechemos", manifestó el obispo de Río Cuarto.
El obispo de Río Cuarto animó a "vivir una auténtica religiosidad, que purifica las motivaciones y el interior del corazón".
"Al final de nuestra vida se nos pedirá cuenta de qué hicimos con la fe que recibimos, con lo que nos propuso Jesús; pero la fe no se impone", dijo el obispo de Río Cuarto.
"El paso de la fe hacia Él como pan vivo bajado del cielo, que se manifiesta especialmente en su palabra, y el paso de recibirlo en la Eucaristía", aseguró el obispo de Río Cuarto.