Sábado 7 de septiembre de 2024

Mons. Uriona: 'Dios siempre se manifiesta a través de caminos de sencillez y de humildad'

  • 11 de julio, 2024
  • Río Cuarto (Córdoba) (AICA)
"Dios no se manifiesta de una manera asombrosa. Dios nos manda a nosotros, que somos gente sencilla y humilde, pobre muchas veces, a predicar el Evangelio", aseguró el obispo de Río Cuarto.
Doná a AICA.org

El obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, monseñor Adolfo Uriona FDP, presidió la Eucaristía por el 14° domingo del tiempo ordinario en la capilla Inmaculado Corazón de María y San Expedito.

A la luz de la narrativa evangélica, el prelado recordó que "Dios no se manifiesta de una manera asombrosa. Dios nos manda a nosotros, que somos gente sencilla y humilde, pobre muchas veces, a predicar el Evangelio. Muchas veces, cuando una persona es sencilla y es pobre, ya lo dejan de escuchar, porque este mundo que busca siempre lo espectacular, lo grandioso y aparente, cuando alguien es sencillo y es pobre, muchas veces lo deja de lado y no acepta su mensaje".  

"Y uno puede preguntarse -continuó-: '¿Por qué Dios no manda a alguien con mucha fuerza, poder, convencimiento, con capacidad de hacer milagros y que tenga ese poder y esa capacidad de hacer callar a sus adversarios?'. Porque Dios no quiere forzar la fe de nadie. La fe es siempre libre y Dios, a propósito, quiere que esa fe se transmita a través de medios pobres y sencillos, a través de una Iglesia pobre y sencilla".

Mons. Uriona aseguró que, "para hacer milagros Jesús necesita la fe, que crean en Él. Cuando no hay fe, nosotros cercenamos la obra de Dios; Él no puede hacer nada, porque jamás va a invadirnos y tampoco ir en contra de lo que nosotros pensamos. Es el modo de ser de Dios, que respeta tanto la libertad humana".

"Frente al rechazo o no comprensión cuando transmitimos el Evangelio, no hay que tirar todo por la borda o decir: 'Acá yo no hago nada más, porque la gente no responde', no. Quizás hay alguno que, si nosotros le transmitimos la Palabra, la reciba y haga bien, aunque sea uno; vale la pena, tal como hizo Jesús en su pueblo", enfatizó.

Y finalizó: "Pidamos al Señor que nos ayude a comprender sus caminos, que son tan distintos de los nuestros y tan distintos al modo de obrar del mundo. Dios siempre se manifiesta a través de caminos de sencillez y de humildad; ese es el rostro auténtico de Dios, y le pedimos que nos ayude a comprenderlo de corazón".+