El papa Francisco y los representantes de la Iglesia en Buenos Aires expresaron su cercanía ante la muerte de Diego Armando Maradona. El Papa envió un rosario, y el cardenal Poli asistió al velorio.
El arzobispo de La Plata destacó que el futbolista nunca perdió la fe popular que le transmitió su madre, por eso se hacía la señal de la cruz, pedía ayuda a la Virgen, mencionaba a Dios sin vergüenza
El "cura de la selección", presbítero Juan José Medina, recordó el vínculo del "Diez" con la fe y reconoció que la capilla de la AFA está abierta gracias al futbolista.
"El Papa reza por él como lo ha estado haciendo en los últimos días cuando se agravaron sus condiciones de salud", informó el vocero vaticano. También le envió un rosario bendecido a su familia.