El padre Luigi Brena, de 64 años, secuestrado el domingo 3 de julio, fue liberado en una redada llevada a cabo por las fuerzas policiales
En un telegrama el Santo Padre expresó su pesar por la muerte de "su hermano", el cardenal brasileño fallecido el 4 de julio. La Ceama y la Repam agradecieron también por su legado y memoria.