Lo planteó el arzobispo en el contexto del Encuentro Anual de Cáritas Buenos Aires. Invitó a vivir la esperanza como compromiso concreto.
Mons. Ricardo Araya destacó que un santuario y sus peregrinaciones son obra de Dios y del pueblo fiel, llamado siempre a renovar la esperanza más allá de las dificultades.
La Eucaristía fue presidida por el obispo diocesano, Mons. Adolfo Canecín, quien destacó la trascendencia espiritual de este templo para la comunidad diocesana.
Consagrados y consagradas compartieron oración, fraternidad y misión, visitando comunidades y culminando con la Eucaristía presidida por el obispo local, monseñor Ricardo Araya.