Viernes 29 de marzo de 2024

Los obispos filipinos recuerdan que la fe en Dios es más fuerte que el tifón

  • 13 de noviembre, 2013
  • Manila (Filipinas)
Monseñor José Palma, presidente de la Conferencia Episcopal Filipina, envió un mensaje, en el que los obispos filipinos exhortan al coraje y a la fe de la población en este momento de gran adversidad. "Ninguna calamidad o desastre natural puede apagar el fuego de nuestra esperanza", señalan. Los prelados invitan a los fieles a dirigirse a Dios "en este momento de calamidad nacional", como cada filipino ha siempre hecho "en los últimos 400 años". Ningún tifón o aluvión puede disminuir la "fuerza de ánimo" de los filipinos; el cataclismo que "devastó" el centro del país "puede ser el peor jamás visto antes en el mundo", pero la fe en Dios es "aún más fuerte", expresa el mensaje episcopal.
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Monseñor José Palma, presidente de la Conferencia Episcopal Filipina, envió un mensaje, en el que los obispos filipinos exhortan al coraje y a la fe de la población en este momento de gran adversidad. "Ninguna calamidad o desastre natural puede apagar el fuego de nuestra esperanza", señalan. Los prelados invitan a los fieles a dirigirse a Dios "en este momento de calamidad nacional", como cada filipino ha siempre hecho "en los últimos 400 años".

Ningún tifón o aluvión puede disminuir la "fuerza de ánimo" de los filipinos; el cataclismo que "devastó" el centro del país "puede ser el peor jamás visto antes en el mundo", pero la fe en Dios es "aún más fuerte", expresa el mensaje episcopal.

Del 11 al 19 de noviembre en todo el país se celebrará una novena de oración por las víctimas del tifón Haiyan y del sismo que golpeó las mismas zonas semanas atrás. Cada misa y oración serán ofrecidas por las almas de los difuntos y para consolar a los familiares de las víctimas. Además, en todas las parroquias se invitó a promover colectas para las intervenciones de emergencia y la reconstrucción de las zonas afectadas.

Por su parte, el arzobispo de Seúl, monseñor Andrew Yeom Soo-jung, envió sus condolencias al cardenal Luis Antonio Tagle, arzobispo de Manila, y aseguró la oración de los católicos de Corea del Sur; la arquidiócesis de Seúl envió 50.000 dólares para las primeras operaciones de ayuda y asistencia. Está prevista también una colecta especial para el 24 de noviembre en todas las parroquias.

El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, declaró el estado de calamidad en todo el país a raíz de la devastación causada por el peor desastre natural de su historia. El tifón afectó a casi 10 millones de personas, según las ONG presentes en la zona, y muchas luchan ahora por sobrevivir sin agua, comida ni refugio. Se calcula que hay 615.000 desplazados, de los cuales 433.000 se encuentran alojados en los 1.444 centros de evacuación.

Además de las muertes provocadas por la caída de objetos a raíz del fuerte viento, con rachas superiores a los 300 kilómetros por hora, una repentina subida de la marea y el fuerte oleaje, similar a un tsunami, parece haber sido la causante de la mayoría de fallecimientos.


Cáritas Asia envía a las víctimas un mensaje de amor y esperanza
Un "mensaje de amor y esperanza" llegó a la población de las Filipinas enviado por Cáritas Asia.

Las Cáritas de los 23 países asiáticos expresan "profunda tristeza, dolor y preocupación por la pérdida de vidas, víctimas del tifón Haiyan". El texto del mensaje, firmado por el presidente, el obispo japonés moseñor Yama Isao Kikuchi, afirma: "En nombre de la Confederación Cáritas en Asia, ofrecemos un mensaje de amor y esperanza, junto a nuestras oraciones y nuestro compromiso con la reconstrucción de las vidas destruidas por el tifón".

El texto llama "al espíritu indomable que reside en el pueblo de Filipinas, junto con su profunda fe en Dios", con la esperanza de que "siga siendo más fuerte que nunca para ayudar a superar esta tragedia". "Espero que encuentren en Dios el coraje de recordar siempre que nuestra fuerza emana de Él", dice el texto.

El presidente de Cáritas Asia recuerda las palabras del Salmo 23. "Aunque ande en valles de sombras, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo", y asegura que se realizarán todos los esfuerzos de solidaridad posibles por parte de Caritas Asia, junto con otros miembros de la Confederación de Caritas Internationalis, en favor de las comunidades afectadas por el tifón: "las 23 Cáritas de los países asiáticos -insiste - trabajarán en estrecha colaboración con Cáritas de Filipinas para llevar las ayudas rápidamente y poder aliviar el sufrimiento de las familias afectadas, para que puedan reconstruir sus vidas y traer futuro luminoso a la población".+