En un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo, celebraron el tedeum en presencia de autoridades nacionales, provinciales, y miembros de otros credos, e invocaron la protección de Dios a la Patria.
Fue el pedido que hizo el obispo de San Francisco al concelebrar la misa por el 25 de Mayo en la Iglesia Nacional Argentina de Roma, presidida por el cardenal Leonardo Sandri.
El arzobispo de Córdoba llamó a ser "los buenos samaritanos de hoy" y exhortó a que cada uno, desde sus responsabilidades, se ponga la "patria al hombro".
El obispo auxiliar de Corrientes presidió el tedeum por el 25 de mayo y pidió "trabajar por las personas que habitan nuestro suelo, especialmente los más pobres y débiles".