La policía antimotines obligó a Mons. Rolando Álvarez a quedarse en la curia. El prelado reaccionó cantando, bendiciendo a los efectivos y exhibiendo el Santísimo, para pedir el cese de la represión.
La semana de oración y fraternidad tuvo lugar en la octava pascual, desde el 18 hasta el 21 de abril. Se trataron temas como la prevención de abusos, la sinodalidad y el Fondo Común del Clero.
El obispo de Mar del Plata comentó la actitud de recapacitación del hijo menor, la mentalidad mercantilista del hijo mayor, y la ternura entrañable que experimenta el padre.
El obispo resumió en tres puntos el Evangelio y las lecturas de este domingo: la invitación a interpretar los signos en la realidad, la urgencia de conversión, y la paciencia de Dios.