El organismo eclesial latinoamericano expresó su consternación y profunda indignación por los crímenes. En tanto, los obispos mexicanos dicen "basta de violencia" y piden convocar al diálogo nacional.
El presidente del Episcopado, Mons. Luis José Rueda Aparicio, renovará esta consagración en la catedral de Bogotá. La primera tuvo lugar el 22 de junio de 1902.
La Conferencia Episcopal de Ecuador hizo un llamamiento al gobierno nacional y a los movimientos sociales y políticos para "buscar juntos soluciones adecuadas pensando ante todo en el bien común".
Los jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora eran grandes "enamorados" de la Sierra Tarahumara; su último acto de valentía fue proteger a un hombre herido.