La Santa Sede acoge con satisfacción el nuevo tratado sobre propiedad intelectual
- 11 de julio, 2024
- Ginebra (Naciones Unidas) (AICA)
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU en Ginebra afirmó que el nuevo tratado internacional representa un paso importante hacia un sistema "dinámico y con visión de futuro".
La oficina de la OMPI en Ginebra
El arzobispo Ettore Balestrero, Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales en Ginebra, ha acogido con satisfacción un nuevo tratado histórico sobre propiedad intelectual.
En un discurso ante los estados miembros de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) de las Naciones Unidas, el arzobispo calificó el tratado como un "importante paso adelante".
El Tratado
Los Estados miembros de la OMPI adoptaron el acuerdo, que trata sobre "Propiedad intelectual, recursos genéticos y conocimientos tradicionales asociados", en mayo de este año.
El tratado establece un nuevo requisito de divulgación en el derecho internacional para los solicitantes de patentes cuyas invenciones se basen en recursos genéticos y/o conocimientos tradicionales asociados.
Fue el primer tratado de la OMPI en más de una década, así como el primero en abordar los recursos genéticos y los conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas.
En ese momento, el director general de la OMPI dijo que el tratado demostraba que el sistema de propiedad intelectual podía "seguir incentivando la innovación" y, al mismo tiempo, "evolucionar de una manera más inclusiva, respondiendo a las necesidades de todos los países y sus comunidades".
Un 'paso significativo'
En su discurso -dirigido a la 65ª serie de reuniones de las Asambleas de los Estados miembros de la OMPI-, el arzobispo Balestrero dijo que el tratado es un "paso significativo" hacia un "sistema de propiedad intelectual dinámico y con visión de futuro".
Señaló que la Santa Sede aprecia el énfasis en "la participación de los pueblos indígenas y las comunidades locales", de una manera "sensible a los contextos culturales y jurídicos específicos en los que viven".
El arzobispo añadió que el tratado ayudaría a promover la "revitalización de las negociaciones sobre el conocimiento tradicional y las expresiones culturales tradicionales" a nivel diplomático.
Además, afirmó el Observador, la Santa Sede considera "crucial" el hecho de que el tratado se haya logrado por consenso.
El arzobispo Balestrero concluyó su discurso reafirmando el compromiso de la Santa Sede con la futura colaboración con la OMPI, "con el fin de fomentar un diálogo constructivo, con el objetivo de avanzar en el sistema de propiedad intelectual".
Esto, dijo, es parte del compromiso más amplio de la Santa Sede de apoyar el Desarrollo Humano Integral.+
