Edificios importantes de varias ciudades del mundo se teñirán de rojo este miércoles 20 de noviembre, como parte de la campaña de Ayuda a la Iglesia Necesitada en favor de los cristianos perseguidos.
El primado de los greco-católicos afirmó que los de la guerra han sido "mil días de muertes", pero también "mil días de experiencia de la presencia del poder de Cristo resucitado en los ucranianos".
Unas 2 mil personas, entre ellas más de 150 obispos, así como jefes de Estado extranjeros, participarán de los actos de reinauguración los días 7 y 8 de diciembre.
El prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, se encuentra con quienes "lo han perdido todo".