Venezuela: El arzobispo de Caracas apeló a la 'esperanza frente a la violencia y el mal'

Monseñor Raúl Biord SDB abrió la Puerta Santa del Jubileo de la Esperanza de la catedral metropolitana de Caracas e invitó a los fieles a inundar Venezuela de esperanza.

"Inundar Venezuela de esperanza", fue la invitación que hizo a los fieles el arzobispo de Caracas, monseñor Raúl Biord, durante la apertura de la Puerta Santa del Jubileo de la Esperanza, en la catedral metropolitana de Caracas.

Al inicio de la celebración, se llevó a cabo el rito introductorio con tres actos: la collectio ("reunión") en el templo San Francisco; la peregrinación desde aquel recinto (con la participación de al menos 150 jóvenes de la Pastoral Juvenil de Caracas, quienes cargaron la Cruz del Jubileo, el obispo de la Iglesia local, unos 45 seminaristas, 250 monaguillos, 20 diáconos y 150 sacerdotes del clero caraqueño); y, por último, la entrada en la catedral.

Una vez hecha la apertura de la Puerta Santa, se dio inicio a la Eucaristía de la Esperanza en un templo colmado de fieles de las distintas parroquias de la arquidiócesis.

"La esperanza cristiana no engaña ni defrauda, porque está fundada en la certeza de que nada ni nadie podrá separarnos nunca del amor de Dios. El Jubileo es para todos nosotros ocasión de reavivar la esperanza. Tenemos la certeza que Dios nunca nos abandona, sino que viene a habitar las tinieblas e iluminarlas con la luz de la esperanza y mantiene encendida una llama que nunca se apaga, para dar apoyo y vigor a nuestra vida", expresó monseñor Biord. 

"La misión es ser peregrinos de la luz -agregó- pues frente a la violencia y el mal, la esperanza tiene siempre la última palabra'", dijo el arzobispo durante su homilía, donde también hizo referencia a la liberación de los presos, los derechos humanos, los migrantes y los jóvenes, entre otros asuntos.

"Propongo a los gobiernos del mundo -expresó- que en el Año del Jubileo se asuman iniciativas que devuelvan la esperanza; formas de amnistía o de condonación de la pena orientadas a ayudar a las personas para que recuperen la confianza en sí mismas y en la sociedad; itinerarios de reinserción en la comunidad a los que corresponda un compromiso concreto en la observancia de las leyes".

Respeto a los derechos humanos
La autoridad eclesial recordó que el Papa Francisco exhorta a una alianza social para la esperanza y llamó a enfrentar las injusticias y a construir una alianza social inclusiva, dejando de lado divisiones ideológicas.

"Pido el respeto a los derechos humanos y ciudadanos en un marco democrático de libertad de pensamiento, de expresión y de acción social, y también el cese de toda forma de intimidación y de odio venga de donde venga", sostuvo monseñor Biord.

Asimismo, aseguró su compromiso como Iglesia arquidiocesana de Caracas por organizar y potenciar a Cáritas como una red comunitaria de servicio social, formación y transformación. Y recordó de manera especial a los migrantes, deseando que encuentren seguridad, acceso al trabajo ya la educación de sus hijos: "No se olviden que esta es su casa, y aquí los recordamos con cariño y los esperamos para seguir construyendo una Venezuela amplia".

La esperanza cristiana no engaña ni defrauda
"La esperanza cristiana es precisamente el 'algo más' que nos pide movernos 'sin demora' para llevar esperanza donde se ha perdido", subrayó el arzobispo.

"La esperanza cristiana no engaña ni defrauda, porque está fundada en la certeza de que nada ni nadie podrá separarnos nunca del amor de Dios", exclamó reiterando que el Jubileo es para todos, una ocasión de reavivar la esperanza, con la certeza que "Dios nunca nos abandona, sino que viene a habitar las tinieblas e iluminarlas con la luz de la esperanza y mantiene encendida una llama que nunca se apaga, para dar apoyo y vigor a nuestra vida".

"Que la apertura de este Año Jubilar sea, para todos, una invitación a mirar el futuro con esperanza y a comprometernos en construirla con gestos concretos", pidió Biord invitando a "que seamos capaces de dar una sonrisa, un gesto de amistad, una mirada fraterna, una escucha sincera, un servicio gratuito, una caridad, un paso adelante. ¡Inundemos a Venezuela de esperanza!".

Antes de finalizar la misa, el párroco de la catedral, presbítero Juan Carlos Silva, leyó las fiestas jubilares en la arquidiócesis de Caracas y anunció la peregrinación de la imagen del Nazareno de San Pablo por los arciprestazgos de la iglesia, a partir de marzo, en el contexto de los 350 años de la consagración de esta imagen tan querida por los caraqueños.+