Jueves 21 de noviembre de 2024

Ángelus: el hombre no pertenece a ningún 'César'

  • 22 de octubre, 2023
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Durante el rezo de la oración mariana pronunciada en la plaza de San Pedro este domingo 22 de octubre, el Papa llamó a ser ciudadanos responsables y pertenecientes sólo a Dios.
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"No pertenecemos a ninguna realidad terrenal, a ningún 'César' de este mundo. Somos del Señor y no debemos ser esclavos de ningún poder mundano", dijo el Papa Francisco este domingo 22 de octubre, durante el rezo del Ángelus, a los miles de fieles congregados en la Plaza de San Pedro.

En su reflexión previa a la oración mariana, el pontífice reflexionó sobre la pregunta incluida en el Evangelio de Mateo de este domingo: “¿Es lícito pagar impuesto al César o no?”. Esta es la pregunta trampa de los herodianos a Jesús: “Si Jesús legitima el impuesto, se pone de parte de un poder político mal respaldado por el pueblo; mientras que si dice de no pagarlo, puede ser acusado de rebelión contra el imperio”, explicó el Papa.

Francisco explicó que Jesús “escapa de esta trampa” pidiendo que le muestren una moneda, que lleva impresa la imagen del César y les dice: “Pues den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”. ¿Qué significa esta frase, que se ha convertido en algo de uso común?

“A veces se ha utilizado de manera equivocada, o al menos reductiva -dice el Papa-, para hablar de las relaciones entre Iglesia y Estado, entre cristianos y política; a menudo se entiende como si Jesús quisiera separar a 'César' y a 'Dios', es decir, la realidad terrenal de la espiritual. A veces, también nosotros pensamos así: una cosa es la fe con sus prácticas y otra cosa, la vida de todos los días. No. Eso es una esquizofrenia, como si la fe no tuviera nada que ver con la vida concreta, con los desafíos de la sociedad, con la justicia social, con la política, etcétera”

En realidad, dice Francisco, “Jesús quiere ayudarnos a colocar al 'César' y a 'Dios', cada uno, en su importancia real: al César -es decir, a la política, a las instituciones civiles, a los procesos sociales y económicos- pertenece el cuidado del orden terrenal, de la polis; y nosotros, que en esta realidad estamos inmersos, debemos restituir a la sociedad lo que nos ofrece a través de nuestra contribución de ciudadanos responsables, prestando atención a lo que se nos confía, promoviendo el derecho y la justicia en el mundo del trabajo, pagando honestamente los impuestos, comprometiéndonos por el bien común, etcétera”.

Al mismo tiempo, Jesús afirma algo que es “la realidad fundamental”: “A Dios pertenece el hombre, todo hombre y todo ser humano. Esto significa que nosotros no pertenecemos a ninguna realidad terrenal, a ningún “César” de este mundo. Somos del Señor y no debemos ser esclavos de ningún poder mundano”.

De este modo, el Papa subrayó que “Jesús nos recuerda que en nuestra vida está impresa la imagen de Dios, que nada ni nadie puede oscurecer: al César pertenecen las cosas de este mundo, pero el hombre y el mundo mismo pertenecen a Dios; ¡no lo olvidemos!”.

Como también lo hizo en otras ocasiones, Francisco dejó algunas preguntas para los fieles que estaban en la Plaza San Pedro: “¿Tú qué imagen llevas dentro de ti? ¿De quién eres imagen en tu vida? ¿Nos acordamos de pertenecer al Señor, o nos dejamos modelar por las lógicas del mundo y hacemos del trabajo, de la política, del dinero, nuestros ídolos a adorar?”.+