En el Ángelus, el Papa renovó el llamamiento a las autoridades políticas y civiles en favor de los países en guerra, y de aquellas poblaciones cuya dignidad y territorios son explotados.
En su exhortación, el Papa se centró en el amor conyugal y consideró esencial que los esposos estén "abiertos al don de la vida, los hijos, que son la mayor bendición de Dios".
Francisco recordó este domingo que es importante conocer al Señor, pero también lo es seguirlo y dejarnos transformar por su Evangelio.
Envió además un mensaje de solidaridad a la madre de un joven rehén, encontrado muerto a principios de septiembre, asesinado por Hamás.