Así lo expresó Francisco tras el rezo del Ángelus. También volvió a repudiar la guerra como forma de resolver los conflictos. "Que callen las armas y que se dé espacio al diálogo", postuló nuevamente.
Pidió que cesen los ataques contra la población civil y las fuerzas de paz en el Líbano. También exhortó a "no dejar morir de frío a los ucranianos" y se refirió a la situación "dramática" en Haití.
En su primer discurso ante la autoridades de este país "puente" de Europa, Francisco pidió a los responsables de las naciones que aprendan de la historia y eviten nuevas catástrofes
"El deseo de reconstruir es más fuerte que la destrucción de la guerra", manifestó el sacerdote Gabriel Romanelli IVE, párroco de la Sagrada Familia en Gaza, tras la celebración eucarística.