La ayuda se dirige especialmente a los heridos de guerra. Se trata de un lote de medicinas por un valor de 100 mil euros. No es la primera donación que el pontífice envía a esa tierra martirizada.
Al recibir en audiencia a la presidencia de CEAMA y REPAM, el pontífice les agradeció el trabajo que realizan y los animó a seguir en el "camino sinodal".
El Papa elogia al Movimiento de los Focolares por fomentar el diálogo interreligioso y por sus esfuerzos en pro de la unidad, el respeto mutuo y la consolidación de la paz.
En su mensaje para dicha Jornada, que se celebrará el 29 de septiembre, el Santo Padre alerta que la petición de auxilio de los migrantes es la misma que hizo Jesús.