Fue en la 46ª Peregrinación al santuario mariano nacional. Mons. Tissera recordó que "la comida no puede ser una variable de ajuste" y rezó por los que trabajan por la cultura del encuentro.
Reflexionaron sobre la "Espiritualidad de Manuel y su libertad al lado de la Virgen", y conocieron más a Mama Antula. Comenzaron además los preparativos para los 400 años del milagro de Luján.
Los miembros de esa asociación sin fines de lucro, ubicada en Luján y dedicada al cuidado y acompañamiento de pacientes terminales, celebrarán una misa de acción de gracias en la basílica.
La misa en el santuario mariano nacional fue presidida por el arzobispo Jorge Scheinig, quien animó a seguir el camino sinodal sin miedos, y a afrontar la vida con fe y esperanza.