Tras el rezo del Ángelus, el pontífice se unió al clamor de los obispos peruanos: "¡No a la violencia, venga de donde venga! ¡No más muertes!". Exhorta a pedir a los cristianos que oren por la paz.
Francisco invitó a renunciar al tiempo que se pierde en tantas cosas inútiles y llamó a ponerse en camino emprendiendo las nuevas aventuras que pide el Señor.
El Papa afirmó que "la Palabra de Dios es 'viva y eficaz', invita a la conversión y llama a la misión". Confirió ministerios del lectorado y de la catequesis a diez personas.
"Creíbles no por la ropa que llevas, sino si eres sincero", indicó el Papa a la comunidad del Pontificio Colegio Urbano que forma el clero destinado a los territorios de misión.