"No nos dejemos ganar por el miedo, la indiferencia o el alarmismo. Actuemos con sumo cuidado, sin dejar de estar presentes", sostuvo el arzobispo al presidir anticipadamente la Misa Crismal.
El arzobispo de San Juan de Cuyo advirtió sobre tres tentaciones "comunes" de las cuales hay que cuidarse en este tiempo: el escepticismo, el egoísmo y la hipocresía.
"Cuando nosotros estamos frente a la posibilidad de sostenernos en la vida, eso no se puede politizar. La vacuna es para bien de todos", aseveró el presidente del episcopado en su reflexión semanal.
Celebrando los 60 años de la diócesis y el Año de San José, el obispo de Rafaela animó a vivir la Cuaresma "desde la fe", vislumbrando "un horizonte de esperanza".