La Provincia Centroamericana de los Jesuitas asegura que la decisión del régimen de Ortega es "una violación de los derechos humanos", orientada a consolidar "un Estado totalitario".
El Episcopado recuerda que "la violencia nunca es un camino legítimo", y llama a las autoridades y demás actores implicados a buscar una solución a los graves problemas que afectan al sur de ese país.
"Tenemos la esperanza de comenzar una nueva época y hacer realidad la quimera de un país más justo, solidario y equitativo", expresó el arzobispo de Asunción durante el Tedeum del 15 de agosto.
El obispo de Baní celebra hoy una misa, con la presencia del presidente de la República, en sufragio por las almas de las 12 personas fallecidas en esa tragedia.