Vaticano: el Papa reza por las víctimas del 'horror de la guerra'

En sus oraciones tras su catequesis sobre la soberbia, el pontífice recordó hoy, una vez más a la s víctimas de las guerras en Ucrania y Tierra Santa.

El Papa Francisco recordó hoy, miércoles 6 de marzo, durante la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro en el Vaticano, a las víctimas del “horror de la guerra” en Ucrania y Tierra Santa.

“Una vez más, hermanos y hermanas, renuevo mi invitación a orar por las poblaciones que sufren el horror de la guerra en Ucrania y Tierra Santa, así como en otras partes del mundo”, dijo al final de la conferencia pública semanal, ante el público que colmaba la plaza de San Pedro.

“Oremos por la paz, pidamos al Señor el don de la paz”, añadió.

Francisco, limitado en las últimas semanas por problemas respiratorios, encomendó una vez más la lectura de sus reflexiones iniciales a un colaborador.

“La catequesis de hoy la leerá un colaborador mío, porque todavía estoy resfriado y no puedo leer bien. Gracias”, comenzó diciendo a los peregrinos presentes.

La catequesis, inserta en un ciclo de reflexiones sobre “vicios y virtudes”, abordó el pecado de la “soberbia”.

“Una persona soberbia es aquella que se cree mucho más de lo que realmente es; quien se esfuerza por ser reconocido como superior a los demás, quiere siempre que se le reconozcan sus méritos y desprecia a los demás, considerándolos inferiores”, advirtió el Papa en su texto.

Y continuó: “El vicio de la soberbia destruye la fraternidad, porque el soberbio no se relaciona con los demás en un plano de igualdad, sino que los trata como inferiores y emite juicios en contra de ellos”. “Jesús nos medica con el remedio de la humildad. Esto nos enseña que la salvación no está en nuestras propias manos, sino que es un don gratuito que Dios nos quiere regalar”, añadió.

Francisco también dejó un saludo a los grupos presentes, entre ellos los peregrinos de habla española, y a los de lengua portuguesa les expresó: “Particularmente durante este mes, los invito a cada uno de ustedes a fijar la mirada en san José. Su humildad y su silencio ayudarán. Nos ayudará a luchar contra la tentación de la soberbia”.

La Plaza de San Pedro acogió también a una delegación de Podkarpacie, Polonia, con motivo del 80º aniversario de la muerte de la familia Ulma, fusilada por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial por ayudar a los judíos.

Para conmemorar el aniversario, se celebrará una ceremonia en los Jardines Vaticanos, con la plantación del manzano injertado por el beato Józef Ulma.

Al bendecir a las personas, presentes en la audiencia general, les dijo: “En estos días de Cuaresma, continúen con valentía su compromiso de liberarse de todo lo que enmascara su vida, recurriendo de todo corazón a Dios, que nos ama con amor eterno”, apeló.+