Viernes 21 de marzo de 2025

Mons. Martínez animó a cultivar una fe fundamentada en la humildad y el silencio

  • 20 de marzo, 2025
  • Posadas (Misiones) (AICA)
En el marco de la celebración en honor de san José, patrono de la ciudad, el obispo de Posadas destacó los valores esenciales del santo y su vigencia como modelo de vida cristiana.
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En el marco de la fiesta patronal en honor de san José, el obispo de Posadas, monseñor Juan Martínez, presidió la misa en la explanada de la catedral local, donde destacó la figura del santo como pilar en la historia de la Salvación y en la identidad de la ciudad.

La celebración eucarística contó con la participación de autoridades locales y fieles de distintas comunidades. 

En la homilía, el prelado posadeño destacó la fe, la humildad y el silencio fecundo de san José, y subrayó la vigencia de esos valores como modelo de vida cristiana.

"Con una especial alegría, estamos celebrando esta Eucaristía, en esta linda noche que el Señor nos regala. En primer lugar, quiero que le agradezcamos a Dios. La Eucaristía es una acción de gracias, y queremos decirle: 'Amén', porque podemos estar celebrándolo así a san José", recordó.

Monseñor Martínez valoró la tarea de quienes prepararon esta celebración patronal. "Hubo mucha gente que hizo la novena, que trabajó, que hizo una misión. Queremos agradecerles a los sacerdotes, al diácono, a los laicos y a las autoridades presentes, que acompañan al pueblo en esta celebración emblemática y significativa para nuestra ciudad", puntualizó.

"San José es un santo especialmente importante en la historia de la Salvación, tan ligado íntimamente al misterio de la Encarnación. Dios quiso estar cercano a nosotros y se encarnó de María, y a José le dio una misión que cumplió con fidelidad", memoró.

El obispo también marcó el vínculo del santo con la capital provincial, de la que es su patrono. "La primera fundación fue San Roque, pero la segunda, la de Trincheras de San José, dio origen a lo que hoy llamamos Posadas. Desde entonces, siempre hemos celebrado a san José, incluso en tiempos de pandemia", recordó.

Fe, humildad y silencio fecundo
En otro pasaje de su reflexión, monseñor Martínez detalló tres aspectos fundamentales en la vida del santo: "Hablar de san José es hablar de fe, de humildad y de silencio fecundo". 

"San José tenía un vínculo profundo con Dios. No hay palabras suyas en la Escritura, pero sí está su obediencia a los sueños en los que Dios le hablaba. Fue un hombre de fe, guiado por la voluntad divina", precisó, y sostuvo: "La humildad es la puerta de todas las virtudes. Es la clave para el encuentro con Dios. Lo contrario es la soberbia, que nos aleja de Él y nos encierra en nosotros mismos". 

"San José nos enseña el valor del silencio fecundo. Hoy en día nos cuesta cada vez más encontrar momentos de silencio, pero es en ese espacio donde podemos escuchar la voz de Dios y fortalecer nuestro vínculo con Él", completó.


Monseñor Martínez invitó a los fieles a reflexionar sobre su relación con Dios. "Somos cristianos, hablamos de Jesús, pero ¿cuál es nuestro vínculo con Él?", preguntó, y destacó que la fe, aunque es un don de Dios, debe cultivarse. 

Asimismo, subrayó que la humildad y el silencio son esenciales para fortalecer el vínculo con Dios.

El prelado explicó que la humildad es clave para encontrarse con Dios y planteó: "Reconocer que somos necesitados y dependemos de Él es fundamental". 

Tras citar las bienaventuranzas, monseñor Martínez destacó: "Los pobres de espíritu, los humildes, son los que tendrán el reino de los cielos". 

"La humildad es la puerta de todas las virtudes", dijo, y la comparó con la soberbia, que "es el peor de los pecados, ya que aleja al ser humano de la posibilidad de encontrarse con Dios".

"San José es un hombre de silencio, porque en ese silencio vivió la fe en Nazaret, un silencio fecundo", expresó, y advirtió sobre la creciente soberbia en la sociedad actual, que genera insensibilidad y ruptura con los demás.

Por último, monseñor Martínez hizo un llamado a cultivar una fe genuina, fundamentada en la humildad y el silencio; y exhortó a los fieles a pedirle a san José su intercesión para incrementar su fe. 

"Una fe en Jesús, una fe en Dios, que nos permita forjar un vínculo de verdad, que solo podemos construir desde la pequeñez y alimentar si somos capaces de generar un silencio fecundo, donde Dios pueda estar presente", concluyó.+