Mons. García Cuerva: 'El núcleo de la fe está en el amor a Dios y al prójimo'
- 5 de noviembre, 2024
- Buenos Aires (AICA)
"¡Qué lindo que también nosotros podamos descubrir que, en nuestra actividad pastoral, no hay nada más importante que el amor a Dios concretado hacia el prójimo!", exclamó el arzobispo porteño.
Al reflexionar sobre el Evangelio dominical, el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, destacó el modo en que el escriba dialoga con Jesús y se da cuenta de que "el amor a Dios y el amor al prójimo valen mucho más que cualquier ritualismo, que cualquier legalismo".
"¡Qué lindo que también nosotros, al igual que el escriba, podamos descubrir que, en nuestra actividad pastoral, no hay nada más importante que el amor a Dios concretado hacia el prójimo!", exclamó. "Que podamos vivir de verdad lo que significa darle lugar a Dios en nuestra vida, pero sin lugar a dudas mirando también al prójimo", sostuvo. El arzobispo porteño recordó al respecto que, "alguna vez, el papa Benedicto XVI decía que cerrar los ojos al prójimo nos vuelve ciegos ante Dios y, por eso creo que el escriba se debe haber ido contento". "Se debe haber puesto contento, porque Jesús le enseñó donde estaba el núcleo de la fe: en el amor a Dios y al prójimo, y que eso valía mucho más que los holocaustos y sacrificios", subrayó.
Tras citar el salmo que dice: "Yo te amo Señor tú eres mi fortaleza, yo te amo Señor, tú eres mi roca, tu eres mi baluarte", el prelado expresó: "Nosotros también podemos, en la vida cotidiana, ser fortaleza, ser roca, ser baluarte para los demás".
"Que podamos descubrir que, así como Dios es nuestro escudo, Dios es nuestra fuerza salvadora, nosotros también tenemos que serlo para los otros. Cuando nuestra gente se acerca a nuestras comunidades, cuando la gente se acerca a las parroquias, que puedan sentirse y encontrarse con el Dios de la Vida. Con este Dios que es fuerza salvadora, con este Dios que es roca, con este Dios que es baluarte, con este Dios que ama", profundizó.
"En definitiva, que se encuentren con el Dios de la vida aquellos que se sienten oprimidos, aquellos que sufren, aquellos que la están pasando mal. Desterremos también nosotros, de nuestras prácticas pastorales, todo legalismo, porque eso no hace más que alejarnos de Dios, eso no hace más que mostrar una imagen de Dios que no es real, porque se aleja en definitiva del Dios padre y madre, del Dios que ama a todos", concluyó.+