Viernes 26 de abril de 2024

La Iglesia concluyó una semana de misión por el Gran Buenos Aires

  • 4 de junio, 2013
  • Morón (Buenos Aires)
Obispos, sacerdotes, religiosos y laicos de la Región Buenos Aires desarrollaron del lunes 27 al viernes 31 de mayo una misión por diversas localidades de este amplio territorio, llevando la Buena Nueva y la bendición a los vecinos. En Morón se realizaron actividades concretas en el penal de Ituzaingó, el Hospital Güemes de Haedo y la Universidad de Morón. Para el obispo diocesano, monseñor Luis Guillermo Eichhorn, la acción misionera fue "un momento de gracia" en el que el Señor tocó muchos corazones.
Doná a AICA.org
Obispos, sacerdotes, religiosos y laicos de la Región Buenos Aires desarrollaron del lunes 27 al viernes 31 de mayo una misión por diversas localidades de este amplio territorio, llevando la Buena Nueva y la bendición a los vecinos.

En Morón, las actividades fueron organizadas por la Pastoral de la Salud, la Pastoral Carcelaria y la Pastoral Universitaria. Las acciones tuvieron lugar en la Unidad Penitenciaria N° 39, de Ituzaingó, el Hospital Güemes de Haedo y la Universidad de Morón.

Si bien la diócesis se mantiene en estado de Misión Permanente, durante la semana pasada realizaron actividades concretas en los ámbitos mencionados, concluyendo, en algunos casos, con celebraciones en las que miembros de la comunidad recibieron los sacramentos de iniciación cristiana.

El obispo diocesano, monseñor Luis Guillermo Eichhorn, subrayó que la finalidad de este gesto fue renovar la fe, despertar inquietudes, cuestionamientos y encontrar caminos de respuesta. El penal de Ituzaingó, el hospital Güemes y la Universidad de Morón fueron elegidos, según indicó el prelado, por la necesidad que tienen de una presencia más constante del testimonio.

Al día siguiente del cierre, el sábado 1° de junio, durante la fiesta de Corpus Christi, monseñor Eichhorn resaltó además que la Acción Misionera fue "un momento de gracia" en el que el Señor tocó muchos corazones. "La acción de la gracia se pudo ver y palpar, sobre todo en esos lugares donde las condiciones son difíciles para que el Evangelio penetre en los corazones de todos", dijo.

El obispo recordó en esa ocasión la misa celebrada el miércoles en el penal, en la que los obispos impartieron los sacramentos del bautismo, la comunión y la confirmación. Recordó que, al finalizar la Eucaristía, un muchacho preso se acercó y le dijo: "Padre, tengo una alegría y una paz tan grande, que me parece que estoy flotando".

"¡Fíjense lo que es la gracia de Dios, y en ese ambiente! Tenemos que dar gracias a Dios y esto tiene que ser algo que nos mueva a todos", señaló monseñor Eichhorn.+