Viernes 26 de abril de 2024

El arzobispo Schevchuk llamó a condenar "las acciones terroristas de Rusia"

  • 11 de octubre, 2022
  • Kiev (Ucrania) (AICA)
"Si callas hoy, te matarán mañana, como nos están matando a nosotros hoy. Digamos un rotundo "no" al Estado que recurre a este tipo de acciones para lograr cualquier objetivo", expresó el primado.
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El arzobispo mayor de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, su beatitud Sviatoslav Schevchuk, hizo un llamado a la comunidad internacional, jefes de Estado, Iglesias y comunidades religiosas, organizaciones públicas e intelectuales del mundo a unir su voz y “condenar enérgicamente este tipo de acciones terroristas”, tras el ataque con cohetes de Rusia a Kiev en la víspera.

En su videomensaje diario, día 230 de la “guerra cruel, inhumana y sangrienta”, el arzobispo Schevchuk afirmó que “Si callas hoy, te matarán mañana, como nos están matando a nosotros hoy. Digamos nuestro rotundo "no" al Estado que recurre a este tipo de acciones para lograr cualquier objetivo”.

“Hoy, esta mañana, Ucrania se está recuperando del ataque masivo con misiles que Rusia lanzó ayer en Ucrania, dijo el arzobispo mayor, en nuestras ciudades y pueblos. Se conocen decenas de muertos, decenas de heridos. Se confirmaron la muerte de 19 víctimas inocentes de este ataque masivo. Solo en Kiev, 6 personas murieron, más de 50 resultaron heridas. En pocas horas, Rusia lanzó 83 misiles de crucero de varios tipos, decenas de vehículos aéreos no tripulados llenos de potentes explosivos sobre Ucrania”.

“El enemigo quería intimidarnos. Trató de destruir la infraestructura crítica de nuestros pueblos y aldeas, incluido el suministro de electricidad. Pero los ucranianos dejaron de tener miedo hace mucho tiempo. Este tipo de ataque une aún más a nuestro pueblo. Los ucranianos están aún más unidos en su deseo de perseverar hasta el final en esta batalla. Hoy, se anunció nuevamente una alerta aérea desde la mañana en toda Ucrania. Es posible que incluso ahora el enemigo repita un crimen similar”, dijo el primado católico ucraniano, resumiendo la noticia militar de la mañana.

"En nombre de todos los jefes de Iglesias y organizaciones religiosas unidas en el Consejo de Iglesias de Ucrania, considero mi deber condenar en voz alta y contundentemente este acto de terrorismo que la Federación Rusa cometió y está cometiendo contra el pueblo ucraniano. Tales acciones de los rusos son una violación directa del derecho internacional humanitario, las reglas y costumbres de la guerra y no pueden calificarse de ninguna otra manera como crímenes de guerra”, aseveró el arzobispo, condenando las acciones terroristas de Rusia.

En el contexto de la tragedia que se desarrolla en Ucrania, su beatitud Sviatoslav invitó a los fieles ucranianos a reflexionar sobre la resiliencia en medio del dolor.

Según explicó, “la consecuencia de estos hechos recientes, cuando nuestras ciudades y pueblos ardían, es el dolor cada vez mayor de la gente. El dolor de la pérdida. El dolor de los que están en cautiverio ruso. El dolor de los que son torturados. El dolor de las madres que pierden a sus hijos en el frente. El dolor de millones de ucranianos que se ven obligados a abandonar sus hogares. El dolor del pueblo crucificado hoy por un injusto agresor”.

“Los cristianos, subrayó el líder de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, experimentamos siempre nuestro dolor, uniéndolo al dolor de nuestro Salvador crucificado. Y entonces nuestro dolor se convierte en salvación, salvación para nosotros y para el mundo”. 

“Las pruebas que nos permiten encontrar sentido a la vida y superar nuestro propio dolor nos ayudan a atrevernos a asumir nuevas responsabilidades y se convierten en experiencia que es un tesoro para el servicio futuro. El dolor experimentado correctamente se convierte en el tesoro de una persona valiente”, dijo el primado.

El obispo ofreció una receta para superar el dolor: “Cuando tengas dolor, trata de pensar en los demás, sírvelos. A veces es necesario extinguir el dolor del corazón con el dolor del trabajo. El dolor es como un fuego que endurece nuestra personalidad". Y agregó: "¡No le tengamos miedo al dolor! Mirémoslo a los ojos y sabiamente, junto con Cristo, siguiendo el ejemplo de nuestros grandes predecesores, tengamos el coraje de sobrevivir, de resistir en medio del dolor”.

El arzobispo agradeció a los trabajadores médicos que, en particular, están rescatando hoy a los heridos, así como a los trabajadores de la energía ucranianos, que durante la noche de ayer restablecieron el suministro de energía a nuestras ciudades y pueblos, la red que el enemigo intentó destruir. 

"¡Gracias! Gracias a su trabajo, ganamos esta noche y esta mañana. Agradezco sinceramente a todos los ciudadanos de Ucrania que, a pedido de nuestros trabajadores de la energía, ayer redujeron el consumo de electricidad en más del 26 por ciento y brindaron así la oportunidad de restaurar la infraestructura energética destruida de nuestras ciudades. Me inclino en agradecimiento a nuestras fuerzas antiaéreas, que ayer derribaron casi la mitad de los misiles rusos y así evitaron que la mano asesina del agresor destruyera muchas de nuestras ciudades y pueblos”, expresó.

“Hoy, esta mañana, bajo el aullido de la sirena antiaérea, damos gracias al Señor Dios que estamos vivos. Gracias por nuestros defensores, niñas y niños, nuestros militares, rescatistas, todos los que salvan vidas en Ucrania”, concluyó su beatitud Schevchuk.+