El obispo de San Francisco aseguró que este derecho, como otros, hay que cuidarlos "entre todos y para todos, también para quienes no son personas religiosas o creyentes".
El obispo de san Francisco aludió al Bautismo del Señor y a la figura del papa emérito.
El obispo de San Francisco evocó a la Santa Madre de Dios como modelo de los discípulos de Jesús.
El obispo de San Francisco animó a la escucha conmovida del llanto del Niño de Belén y sugirió: "Abramos nuestro corazón para escuchar su Voz en las voces que pueblan nuestra vida".