El Secretario de Estado de la Santa Sede enfatizó la necesidad de una tecnología con una orientación ética en la atención médica.
En español, el pontífice destacó el servicio del purpurado, de 98 años, que fue sometido a una operación y le dijo que supiera que "la Iglesia rezaba por él y que él en persona también lo hacía".
El parte médico de la tarde de este miércoles consignó que el pontífice permaneció "estacionario" y "recibió oxigenoterapia de alto flujo". Su cuadro clínico sigue siendo reservado.
El médico "de cabecera" beneficia no sólo al paciente sino también a los cuidadores, los familiares y la comunidad en general, subrayó Francisco.