La parroquia San Francisco Solano de esa localidad chaqueña fue sede de la misión diocesana que este verano se llevó a cabo en cuatro parajes de su jurisdicción.
En la edición de este año, un grupo de alrededor de 70 misioneros llevaron la Palabra a las localidades de La Cumbre, Charbonier y El Simbolar.
El obispo de Gregorio de Laferrere animó a los misioneros al seguimiento de Jesús, que "se expresa con actitudes que buscan encuentros y generan esperanzas".
En la misa de cierre, el obispo local, Mons. Gustavo Zurbriggen, destacó la presencia de Dios "en medio nuestro" y animó a continuar siendo "sembradores de esperanza y de la palabra de Dios".