"Los peregrinos y turistas que vengan a Roma deben 'respirar' el aire de la caridad cristiana, que no es sólo asistencia, sino atención a la dignidad, a la cercanía, sin publicidad, sin focos", dijo.
En su alocución previa a la oración mariana del Ángelus, el Papa recordó "que, si bien Jesús no nos ahorra las contrariedades, sin abandonarnos nunca, nos ayuda a afrontarlas. Nos hace valientes".
Luego del rezo del Ángelus, Francisco recordó a los países afectados por las guerras y pidió que el Espíritu Santo ilumine la mente de los gobernantes para buscar una "solución pacífica".
Recibir con agrado los beneficios de la inteligencia artificial, pero mitigar sus riesgos, pidió el Santo Padre este sábado a los participantes en la convención sobre IA organizada en el Vaticano.