Antes de culminar el Ángelus dominical, el Santo Padre manifestó su interés para que se "emprenda la vía del diálogo con el fin de superar la crisis política y social" en el país andino.
En el cuarto y último domingo de Adviento, Francisco se detuvo en la figura de José, que supo renunciar a sus certezas tranquilizadoras.
"Encontrar soluciones de paz para el bien de los pueblos", pidió el Santo Padre al final de rezo del Ángelus, ante la situación humanitaria en Nagorno-Karabaj a causa del bloqueo del Corredor Lachin.
Francisco confesó en una entrevista al diario español ABC, publicada el 18 de diciembre, que entregó su renuncia al secretario de Estado por si surge alguna razón de salud que la justifique.