Este domingo, Francisco denunció el sufrimiento en Myanmar, Medio Oriente, Ucrania, Haití y Estambul, al tiempo que reiteró su llamado a la paz. También recordó el Día Mundial de la Lepra
En su alocución previa a la oración mariana desde el balcón del Palacio Apostólico, el Papa pidió invocar a Jesús "donde sentimos que las cadenas del mal y del miedo aprietan con más intensidad".
Francisco recibió a los miembros de la Orden, elogiando su labor de servicio a los pobres y precisando la importancia de la acción "conjunta" entre los diplomáticos y los legados pontificios.
Fue en su discurso ante los miembros de la asociación "Nolite Timere Onlus", comprometida en la acogida de huérfanos de guerra en Ruanda.