Frente a esas situaciones, el arzobispo porteño propuso buscar a Dios: "Dale un tiempito a la oración personal, entrá a alguna iglesia de la Ciudad, y sentate un rato y miralo a Jesús en la cruz".
El obispo de San Francisco anima a levantar la mirada: "En todos los campos de la vida -en la fe y también en el mundo- no nos faltan buenos pastores, perseverantes en ser artesanos de bondad".
El obispo de ese distrito eclesiástico comunicó este lunes el nombramiento del presbítero Miguel Tamagno para ejercer el llamado "ministerio de la consolación", al que le dedica una carta pastoral.
En ocasión de la peregrinación mensual al santuario de Schoenstatt, el arzobispo de Bahía Blanca presidió la Eucaristía en Nuestra Señora del Rosario, de Villalonga.