Mons. Colombo: evitar el juicio superficial y vivir con coherencia cristiana
- 2 de marzo, 2025
- Mendoza (AICA)
Con un mensaje centrado en la misericordia y el amor, el arzobispo de Mendoza subrayó la importancia de vivir como auténticos discípulos de Cristo. Instó a abandonar actitudes de cinismo y grosería.
El arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Colombo instó a los fieles a cuestionarse sobre su actitud hacia los demás, subrayando la necesidad de evitar el juicio superficial y la crítica constante. Durante la misa de este domingo 2 de marzo, 8° del Tiempo Ordinario, celebrada en la basílica de Luján de Cuyo, el prelado advirtió con firmeza sobre la tendencia humana a juzgar a los demás sin mirarse primero a uno mismo.
"Nosotros, como discípulos de Cristo, no debemos escandalizarnos ni juzgar a los demás sin antes mirarnos a nosotros mismos", afirmó monseñor Colombo. Esta declaración resonó fuertemente entre los presentes, quienes escucharon atentamente su llamado a reflexionar sobre cómo, a menudo, nos convertimos en jueces de la moral y la fe de los demás, sin la autocrítica necesaria.
El arzobispo también criticó los comportamientos de grosería, ironía y cinismo, señalando cómo estas actitudes "desfiguran lo que comunicamos y nos alejan de un diálogo auténtico". Por eso, hizo un llamado a la coherencia en las palabras y acciones, que deben reflejar los valores del Evangelio.
Monseñor Colombo continuó su reflexión subrayando que, como discípulos, no debemos intentar superar al maestro, sino ser como Él. "Nuestro horizonte es ser como Jesús, ser misericordiosos como el Padre y el Hijo lo son con nosotros", destacó, instando a los presentes a vivir con una actitud de amor y compasión, tal como Cristo enseñó.
En el contexto de la festividad local de la bendición de los frutos y la devoción a la Virgen de la Carrodilla, el arzobispo de Mendoza llamó a los fieles a ver a los demás "con el corazón", un concepto clave que desarrolló en su mensaje, alentando a la comunidad a dar frutos buenos en su vida diaria.
Por último, invitó a los fieles a reflexionar sobre sus propios comportamientos y a cultivar una actitud de humildad y misericordia, alejándose de juicios rápidos y actitudes de condena hacia los demás. Monseñor Colombo concluyó renovando el llamado a vivir de manera auténtica y fiel al Evangelio, siguiendo el ejemplo de Jesús.+