Miércoles 24 de abril de 2024

Para erradicar la pobreza no sólo hay que dar una mano, sino poner manos a la obra

  • 26 de agosto, 2013
  • Buenos Aires (AICA)
En un mensaje por el Día Nacional de la Solidaridad, que se celebra hoy, el presidente de la Acción Católica Argentina (A.C.A.), Emilio Inzaurraga, aseguró que "para alcanzar la gran meta de erradicar la pobreza en la Argentina, sea el porcentaje que sea, no sólo tenemos que dar una mano, sino que hay que poner manos a la obra" y consideró que el testimonio de la beata Madre Teresa de Calcuta es "una inspiración constante para este objetivo. Su aspecto pequeño y frágil, fue también un signo. Ella nos enseñó que para las grandes obras lo que hace falta es un corazón lleno de amor dispuesto a dar y a darse gratuitamente".
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El presidente de la Acción Católica Argentina (A.C.A.), Emilio Inzaurraga, aseguró que "para alcanzar la gran meta de erradicar la pobreza en la Argentina, sea el porcentaje que sea, no sólo tenemos que dar una mano, sino que hay que poner manos a la obra" y consideró que el testimonio de la beata Madre Teresa de Calcuta es "una inspiración constante para este objetivo. Su aspecto pequeño y frágil, fue también un signo. Ella nos enseñó que para las grandes obras lo que hace falta es un corazón lleno de amor dispuesto a dar y a darse gratuitamente".

El dirigente laico parafraseó al Papa para recordar que "podemos dejarla pasar y también hacer de cuenta que esta propuesta ´no nos toca´. Podemos ´balconear la realidad´ o animarnos a cambiar, a ser protagonistas, a sumarnos a un servicio en marcha, a pasar de la emoción al compromiso, a renunciar al mal, al egoísmo y elegir bien, la verdad, la justicia, la solidaridad, ´a jugar en el equipo de Jesús´ como nos invita Francisco".

En un mensaje por el Día Nacional de la Solidaridad, que se celebra hoy en coincidencia con el natalicio de la beata Madre Teresa de Calculta, Inzaurraga advirtió que "en los últimos años, frente a la pobreza y la exclusión, al fragmentado tejido social, a las catástrofes naturales propias y ajenas, hemos sido testigos de la movilización de los argentinos para tender una mano solidaria a aquellos que la necesitan. Las inundaciones en La Plata, la tragedia en Rosario, son un claro testimonio".

"Se multiplican por miles las acciones que llevan adelante organizaciones de la sociedad civil, movimientos e instituciones religiosas y personas de buena voluntad que suman su compromiso para paliar el hambre, la soledad, la enfermedad, el maltrato, la trata de personas, las adicciones, el trabajo infantil, entre otros flagelos, haciendo florecer servicios que generan una respuesta inmediata, mientras aguardan una solución definitiva a las causas estructurales que afectan la desigualdad social", sostuvo.

"El último informe del Barómetro de la Deuda Social Argentina, que elabora la Universidad Católica Argentina (2012), revela que el 9,6 por ciento de la población participa de actividades solidarias, lo cual no es poca cosa, pero sin embargo siempre se necesita más y además registró un leve descenso en relación a los años anteriores", indicó.

El presidente de la A.C.A. invitó en este marco a "globalizar la solidaridad entre nosotros, a que cada uno se ponga la ´camiseta y salga a la cancha´" y señaló que "la solidaridad que nos enseñó con su vida la Madre Teresa y a la que nos invita el papa Francisco, no es un sentimiento superficial frente a acontecimientos que nos conmueven, sino un valor para vivir cotidianamente, trabajando por una sociedad más justa y más fraterna, atendiendo a cada persona, en especial a los más pequeños e indefensos, a los más necesitados".

"Cada uno tiene su ´Calcuta´ y también cada ´Calcuta´ espera una respuesta, un compromiso. Qué bien nos haría descubrir la que nos toca, para poder desarrollar nuestra solidaridad, allí donde la marginación y la exclusión nos golpea, donde nos interpela para sumar nuestro aporte personal".

Tras destacar la acción que jóvenes, empresarios, la maestra, el trabajador, del que "vota pensando en el bien de todos y no en su propio interés", el ama de casa y del vecino", afirmó que "los gestos personales o las acciones comunitarias, la participación ciudadana y política que buscan solucionar los problemas de fondo, son maneras que tenemos al alcance de la mano para solidarizarnos con el sufrimiento de tantos hombres, mujeres, jóvenes y niños".

Por último, Inzaurraga estimó que "al asumir como propias sus necesidades, podamos aliviar su dolor, ofrecerles ternura y nuestra amistad para trabajar comprometidamente en superar las causas injustas de la pobreza y la exclusión".+