Francisco: La Shoah es una vergüenza para la humanidad

Nunca más se repita un horror como el de la Shoah, que es una vergüenza para la humanidad, expresó el papa Francisco en una carta manuscrita a su amigo el rabino de Buenos Aires, Abraham Skorka. El texto fue leído anoche, en el Parque de la Música de Roma, en ocasión del Concierto: "Los violines de la esperanza", acto organizado para recordar a las víctimas de la Shoah. El Papa desea que quien escuche esta música "pueda ensimismarse en aquellas lágrimas históricas, que hoy llegan a través de los violines, y sienta vergüenza por la humanidad".

Nunca más se repita un horror como el de la Shoah, que es una vergüenza para la humanidad, expresó el papa Francisco en una carta manuscrita a su amigo el rabino de Buenos Aires, Abraham Skorka.

El texto fue leído anoche, en el Parque de la Música de Roma, en ocasión del Concierto: "Los violines de la esperanza", acto organizado para recordar a las víctimas de la Shoah.

El público, escribe el Papa, escuchará música de Vivaldi, Beethoven y otros compositores, "pero el corazón de cada uno de los presentes sentirá, detrás del sonido de la música, que vive el sonido silencioso de las lágrimas históricas, lágrimas de aquellas que dejan huella en el alma y en el cuerpo de los pueblos".

En el concierto tocaron juntos, por primera vez en Italia, doce violines que acompañaban un chelo que sobrevivieron a la Shoah, cada uno con su historia dramática, encontrados y restaurados por el lutier israelí Amnon Weinstein. Entre éstos, el violín que acompañaba a los deportados a las cámaras de gas de Auschwitz; un violín tirado de un tren en viaje hacia los campos de concentración, que fue recogido y conservado por un obrero francés; hay también violines de los músicos hebreos que en 1936 dejaron Alemania para ir a formar la Orquesta filarmónica de Palestina, luego de Israel, querida fuertemente por Toscanini y Huberman para salvarlos de la deportación.

Los violinistas serán músicos representantes de las tres religiones monoteístas, es necesario subrayar la capacidad de la música de unir, más allá de los confines y de dar esperanza también en las pruebas más terribles.

El 1 de noviembre de 2005, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó que el 27 de enero fuera el Día Internacional de Conmemoración de las víctimas del Holocausto. Se eligió esta fecha porque fue el 27 de enero 1945, el Ejército Soviético liberó a los presos del campo de concentración de Auschwitz.+