El Papa pide que se deje rezar donde se quiera hacerlo: 'Las iglesias no se tocan'

Tras el Ángelus dominical, expresó su inquietud por la decisión de Ucrania de prohibir la Iglesia ortodoxa rusa. "Que ninguna Iglesia cristiana sea abolida directa o indirectamente", exhortó.

El Papa Francisco expresó una fuerte preocupación este domingo, al término del rezo del Ángelus: que, a los que quieran rezar, no se les permita hacerlo "en la que ellos consideran su iglesia". Una referencia directa a la decisión del Parlamento ucraniano de prohibir en el país las actividades de la Iglesia ortodoxa rusa, vinculada al Patriarcado de Moscú.

"Sigo con dolor los combates en Ucrania y en la Federación Rusa; y, pensando en las leyes aprobadas recientemente en Ucrania, temo por la libertad de los que rezan, porque quien reza de verdad, reza siempre por todos", expresó.

En ese sentido, planteó que "no se hace el mal porque se reza. Si alguien hace el mal contra su pueblo, será culpable por ello, pero no puede haber hecho el mal porque rezaba. Entonces, que a los que quieran rezar, se les permita rezar en la que consideren su Iglesia. Por favor, que ninguna Iglesia cristiana sea abolida directa o indirectamente: las Iglesias no se tocan".

La ley, votada el 20 de agosto en Kiev por una aplastante mayoría, concede a las parroquias afectadas un plazo de nueve meses para romper sus vínculos con la Iglesia ortodoxa rusa, lo cual provocó la reacción inmediata del Patriarcado de Moscú, que denunció que se pretende "destruir la verdadera ortodoxia canónica y sustituirla por un sucedáneo, una falsa Iglesia".

Nuestra Señora protege y acompaña a los fieles de Nicaragua
El Papa también dirigió su saludo al pueblo de Nicaragua, para animarlo a "renovar" su esperanza en Jesús, ya que "el Espíritu Santo guía siempre la historia hacia proyectos más elevados".

Fue un llamamiento sentido, acompañado de una invocación a la Virgen: "Que la Inmaculada los proteja en los momentos de prueba y los haga sentir su ternura maternal. Que Nuestra Señora acompañe al amado pueblo de Nicaragua".

En efecto, el gobierno de Ortega ha adoptado, en los últimos años, numerosas medidas restrictivas contra la Iglesia católica. La última ha sido la aplicación del régimen fiscal de la economía privada también a las instituciones religiosas, lo que supone gravámenes sobre la renta que normalmente permite a las parroquias, escuelas y otras instituciones poder llevar a cabo sus iniciativas en favor de los fieles.

Una decisión drástica, que se produce tras las detenciones y expulsiones de obispos, sacerdotes y monjas, así como la cancelación de 1.500 ONG, varias de ellas católicas, y la absorción de sus activos por parte del Estado.

Francisco dirigió también su solidaridad a los afectados por la viruela símica, que se ha convertido, según explica, en "una emergencia sanitaria mundial", invitando al mismo tiempo a los gobiernos y a las industrias a ponerse al servicio de los enfermos.

"Rezo por las personas infectadas, especialmente por la población de la República Democrática del Congo. Expreso mi cercanía a las Iglesias locales de los países más afectados por esa enfermedad y animo a los gobiernos y a la industria privada a compartir la tecnología y los tratamientos disponibles, para que nadie carezca de una asistencia médica adecuada", expresó.+