El Papa a la FAO: Urge un giro para enfrentar la pobreza y el cambio climático

En mensaje a la Organización de las Naciones Unidas por la Alimentación y la Agricultura (FAO), reunida en Roma, el papa Francisco se unió al tema del Día Mundial de la Alimentación -"El clima está cambiando y la alimentación y la agricultura también", y advirtió que "la lucha contra el hambre es un objetivo más difícil de alcanzar en presencia de un fenómeno complejo como los cambios climáticos". El pontífice aseguró que la evaluación moral "no alcanza" para preservar al planeta, sino que es necesario "actuar políticamente" y pidió atender a los pequeños productores que sufren "la lógica del consumo".

Con ocasión de la Jornada Mundial de la Alimentación, que este año tiene por tema "El clima está cambiando. La alimentación y la agricultura también", el papa Francisco envió un mensaje al director general de la Organización de las Naciones Unidas por la Alimentación y la Agricultura (FAO), Josee Graziano da Silva.

El mensaje del pontífice fue leído esta mañana por monseñor Fernando Chica Arellano, observador permanente de la Santa Sede ante la FAO, durante el acto inaugural por la Jornada Mundial de la Alimentación que se realizó hoy en la sede de la FAO en Roma.

El Papa expresó que el hecho de que la FAO haya elegido este tema lleva a considerar "la dificultad anñadida que supone para la lucha contra el hambre la presencia de un fenoemeno complejo como el del cambio climaetico".

Asimismo, manifestó que esta situación obliga a cuestionarse sobre la responsabilidad individual y colectiva, "sin recurrir a los faeciles sofismas que se esconden tras los datos estadiesticos o las previsiones contradictorias".

"No se trata de abandonar el dato cientiefico sino de ir maes allae de la simple lectura del fenoemeno o de la enumeracioen de sus mueltiples efectos", advirtió.

Al reflexionar sobre las causas de los cambios que estaen ocurriendo, el Papa subrayó que los diferentes efectos negativos sobre el clima "tienen su origen en la conducta diaria de personas, comunidades, pueblos y Estados".

"Si somos conscientes de esto no bastarae la simple valoracioen en teerminos eeticos y morales. De este modo, el Santo Padre reconoce que es necesario intervenir polieticamente y tomar las decisiones necesarias, disuadir o fomentar conductas y estilos de vida que beneficien a las nuevas y a las futuras generaciones", precisó.

Asimismo, explicó que las instituciones tienen un papel esencial, ya que las acciones individuales "soelo son eficaces si se integran en una red compuesta de personas, entidades pueblicas y privadas, estructuras nacionales e internacionales".

Francisco sostuvo que todas las personas que trabajan o viven en el campo experimentan que, si el clima cambia, tambieen sus vidas cambian, por lo que alertó que "su diario acontecer se ve afectado por situaciones difieciles, a veces dramaeticas", "el futuro es cada vez maes incierto" y "asie se abre camino la idea de abandonar casas y afectos".

Prevalece "una sensacioen de abandono", "de sentirse olvidados por las instituciones", "privados de la ayuda que puede aportar la teecnica", como de la "justa consideracioen por parte de todos los que nos beneficiamos de su trabajo", agregó.

El Papa observó que obtener una calidad que da excelentes resultados en el laboratorio "puede ser ventajoso para algunos, pero puede tener efectos desastrosos para otros", e indicó que el principio de precaucioen no es suficiente, "porque muy a menudo se limita a impedir que se haga algo", mientras que lo que se necesita es "actuar con equilibrio y honestidad".

En otro párrafo de su mensaje, Francisco pidió no olvidar que es el clima el que contribuye a que la movilidad humana sea imparable, y recordó que los datos maes recientes muestran que cada vez son maes los emigrantes climaeticos. Asimismo, afirmó que "no basta impresionarse y conmoverse ante quien, en cualquier latitud, pide el pan de cada diea". Es necesario decidirse y actuar.

Tras asegurar que los niveles de produccioen mundial son suficientes para garantizar la alimentacioen de todos, a condicioen de que haya una justa distribucioen, señaló que "todos estamos llamados a cooperar en este cambio de rumbo: los responsables polieticos, los productores, los que trabajan en el campo, en la pesca y en los bosques, y todos los ciudadanos".

"La voluntad de actuar no puede depender de las ventajas que se puedan obtener, sino que es una exigencia que estae unida a las necesidades que surgen en la vida de las personas y de toda la familia humana", añadió.

Por último, Francisco pidió que los objetivos recogidos en el Acuerdo de Paries no queden en "bellas palabras", sino que se concreten en "decisiones valientes" para que la solidaridad no sea solo una virtud, sino tambieen "un modelo operativo en la economiea, y que la fraternidad ya no sea una simple aspiracioen, sino un criterio de gobernabilidad nacional e internacional".+