Lunes 18 de marzo de 2024

El Papa destacó las cualidades esenciales del buen confesor

  • 23 de marzo, 2023
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Que ame el silencio, que sea magnánimo de corazón y que sea ministro de misericordia. Si todo ese se pone en práctica, dijo Francisco, "los confesionarios ya no estarán abandonados".
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El papa Francisco recibió a los participantes en la XXXIII edición del Curso de formación que ofrece la Penitenciaría Apostólica, Tribunal Supremo de la Iglesia Católica para formar sacerdotes internamente y llegar a ser buenos confesores. El Santo Padre llamó a los sacerdotes a “experimentar la ternura del amor misericordioso de Dios, para ofrecerlo en todo momento a todos los fieles”

En su discurso Francisco subrayó el vínculo indisociable entre la vocación misionera de la Iglesia y el hecho de ofrecer misericordia a todos. La Iglesia no sólo se realiza a sí misma viviendo y ofreciendo misericordia, sino que también cumple su acción apostólica y misionera. La misericordia “realza la santidad y la apostolicidad” de la Iglesia, dijo el pontífice, “haciendo resplandecer el rostro de Dios, la obra de la misericordia divina coincide con la acción misionera de la Iglesia y con la evangelización”.

Por tanto, es fundamental y en particular en este período de Cuaresma, subraya el Papa, prestar atención a la caridad pastoral. Los sacerdotes deben, por tanto, mostrarse disponibles “sin reservas” a la práctica del ministerio de la reconciliación, afirmó el Papa.

Disponibilidad completa
Francisco enumeró algunos comportamientos evangélicos que dan testimonio de esta plena disponibilidad: acoger sin prejuicios, escuchar a los hermanos con “el oído del corazón”; absolver al penitente con "la generosidad del perdón de Dios" y acompañar el camino penitencial, sin forzar, siguiendo el ritmo de los fieles, con paciencia y oración constante. Francisco también destacó cualidades esenciales del buen confesor: que ame el silencio, que sea magnánimo de corazón porque cada penitente debe recordarle su propia condición de pecador y que sea ministro de misericordia. Si todo esto se pone en práctica, los confesionarios ya no estarán " abandonados ", asegura el Santo Padre.

De cara al Jubileo de 2025, el Papa insistió en que la misión evangelizadora de la Iglesia pasa “en gran parte por el redescubrimiento del don de la confesión”. También le gustaría que los planes pastorales previeran sacerdotes "en un horario amplio" en cada "zona pastoral" en las iglesias diocesanas, en las comunidades religiosas, en los santuarios... debe haber "siempre” un confesor "en servicio”. 

Francisco llamó a facilitar el acceso de los fieles "a este encuentro de amor" y a valorar la confesión individual " desde la primera confesión de los niños" hasta los lugares de "cuidado y sufrimiento. Cuando no podemos hacer nada para sanar el cuerpo, siempre podemos hacer mucho, ¡y debemos hacerlo por la salvación del alma!”, destacó el Papa.

Finalmente, el Santo Padre subrayó que hoy abundan en el mundo “focos de odio y venganza” y propuso contrastar “los poderes del mal” multiplicando los “centros de misericordia”. “No olvidemos, dijo el pontífice, que esta es una lucha sobrenatural". Y "aunque sabemos que la victoria sobre las fuerzas del mal será de Cristo", el Papa cree que esta victoria "llega realmente cada vez que se absuelve a un penitente". 

Francisco concluyó animando a los sacerdotes que siguieron esta formación a "redescubrir, profundizar teológicamente y difundir pastoralmente" también las indulgencias -especialmente con vistas al jubileo- y les agradeció su "trabajo cotidiano" que consiste en verter sobre el mundo "ríos de misericordia, humildes arroyos, para apagar los fuegos del mal y encender el fuego del Espíritu Santo".+