Lunes 14 de abril de 2025

Domingo de Ramos: el Papa pidió 'tender la mano al que ya no puede más'

  • 13 de abril, 2025
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Francisco invitó a los fieles a vivir una Semana Santa llevando no solo su propia cruz, sino también la de quienes sufren alrededor. El pontífice participó de la celebración eucarística.
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La Iglesia inició este domingo 13 de abril la Semana Santa, que atravesará la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. En la plaza de San Pedro, la misa tradicional con bendición de ramos que recuerda la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, fue celebrada por el cardenal Leonardo Sandri, prefecto emérito del dicasterio para las Iglesias Orientales y actual vicedecano del Colegio Cardenalicio, quien fue designado por el Papa Francisco ante su ausencia por motivos de salud.

Al final de la celebración, Francisco sorprendió a los fieles y apareció sorpresivamente en la plaza de San Pedro, donde los saludó y deseó a los fieles una buena Semana Santa.

El cardenal Sandri leyó la homilía que escribió el pontífice e invitó a convertirse en cireneos de los demás, cargando no solo con "nuestras propias cruces, sino también con las de quienes sufren cerca o incluso cargando con la de aquella persona desconocida que 'una casualidad' hizo que encontráramos".

El obispo de Roma propuso tres ejes clave en su mensaje para iniciar esta Semana Santa. En primer lugar, el Papa destacó la figura de Simón de Cirene, un personaje que aparece de manera inesperada en el camino hacia el calvario que, a diferencia de Pedro, que prometió seguir a Jesús pero lo negó, Simón de Cirene toma la cruz de Cristo y la lleva: "Simón de Galilea (Pedro) dice, pero no hace.

Simón de Cirene hace, pero no dice; entre él y Jesús no hay ningún diálogo, no se pronuncia ninguna palabra. Entre él y Jesús sólo está el madero de la cruz" dijo el Papa.


La cruz como encuentro con Cristo
En segundo lugar, el Papa señaló que la cruz, cuando llega como imposición o sufrimiento no deseado, puede transformarse en un lugar de encuentro con Cristo si se asume con amor, como le pasó a Simón de Cirene: "El Cireneo es forzado a llevar la cruz; no ayuda a Jesús por convicción sino por obligación", recordó el Papa.

"Pero -dijo- este acto forzado pronto se convierte en encuentro con Jesús y participación en su pasión: se encuentra en primera persona participando en la pasión del Señor. La cruz de Jesús se convierte en la cruz de Simón. La cruz de madera, que el Cireneo sostiene, es la de Cristo, que carga con el pecado de todos los hombres. La lleva por amor a nosotros, en obediencia al Padre sufriendo con nosotros y por nosotros".

Ser apoyo para el otro: el llamado central del Domingo de Ramos
Como tercer aspecto del mensaje del Papa para el Domingo de Ramos es la invitación a llevar no solo nuestra cruz, sino también la del prójimo y convertirnos en cireneos los unos de los otros: 

"Sigamos ahora los pasos de Simón, porque nos enseña que Jesús sale al encuentro de todos, en cualquier situación. La pasión de Jesús se vuelve compasión cuando tendemos la mano al que ya no puede más, cuando levantamos al que está caído, cuando abrazamos al que está desconsolado", finalizó.+