Dedicación del templo y consagración del altar en el santuario de Sampacho
- 15 de marzo, 2024
- Sampacho (Córdoba) (AICA)
La ceremonia está prevista para el próximo sábado 16 de marzo, a las 19, en Nuestra Señora de la Consolata de esa localidad cordobesa. La presidirá el obispo de Río Cuarto, Mons. Adolfo Uriona.
Consagración del altar del santuario de la Virgen de la Consolata
La comunidad del santuario de Nuestra Señora de la Consolata, de la localidad cordobesa de Sampacho, se prepara para la celebración de dedicación del templo y consagración del altar, prevista para el próximo sábado 16 de marzo a las 19.
En el marco del 90° aniversario de la creación de la diócesis, la misa será presidida por el obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, monseñor Adolfo Uriona FDP.
La historia del templo
El presbítero Osvaldo Leone, párroco de la Virgen de la Consolata, contó que la historia del templo comienza con los inmigrantes italianos y el presbítero Vicente Losino, que los acompañaba. Fue este sacerdote quien construyó la primera capilla, que estaba emplazada en el boulevard Sarmiento al 200.
El 19 de marzo de 1893, se crea la Comisión Pro Templo, motivada por el padre Losino, con la intención de construir otro templo, frente a la plaza central. Dos años más tarde, se coloca la piedra fundacional, y se logra terminar, en 1898, una construcción básica.
El 19 de junio de 1902 es creada la parroquia, bajo la advocación de los Santos Ángeles Custodios, en su calidad de patronos de la localidad.
En 1905, llega el presbítero Juan Cinotto, turinés de origen y devoto de la Virgen de la Consolata, quien contagiará su devoción a los feligreses de Sampacho. Por ello, hace traer de su Turín natal un ícono de esa advocación de la Virgen, que llega en 1906.
Estos primeros años se realizan triduos en honor a la Santísima Madre y, en 1908, se celebra la primera novena, seguida de una procesión presidida por el ícono de la Virgen. En 1911, llega otra imagen de la Virgen, adquirida gracias a la donación de un vecino de la zona rural, de apellido Fassano. Es una imagen muy bella, de gran envergadura, con un peso de 1.232 kg, la cual cada año es portada en andas por 28 hombres.
En 1915, la Virgen de la Consolata es declarada patrona del pueblo por el papa Benedicto XV, a pedido del padre Cinotto. La devoción crece constantemente y, por ello, en 1946 el templo es declarado santuario diocesano por el que fue luego el primer obispo de Rio Cuarto, monseñor Leopoldo Buteler.
Ese año también se produce el fallecimiento del padre Cinotto, cuyos restos descansan a los pies de la Virgen.
En 1947, se inaugura el camarín de Nuestra Señora de la Consolata y, en 1953, el camarín del Santo Cristo del Perdón.
El templo ha sido declarado patrimonio histórico local en 2005, Monumento Histórico Provincial en 2014 y, finalmente, Bien de Interés Histórico Nacional, en 2020.+
