Jueves 28 de marzo de 2024

Centenario de la declaración de la Virgen de la Consolata como patrona de Sampacho

  • 24 de abril, 2015
  • Sampacho (Córdoba)
La parroquia y santuario de Sampacho, en la diócesis de Villa de la Concepción del Río Cuarto, se prepara para los festejos por el centenario de la declaración de Nuestra Señora de la Consolata como patrona de esa ciudad cordobesa, que firmó el 28 de abril de 1915 el papa Benedicto XV. El lunes será la vigilia y el martes 28, tras el repique de campanas a la hora cero, se le cantará el Feliz Cumpleaños a La Consolata. A las 16 será la solemne procesión con la imagen mayor de la Virgen, tras la cual el obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, monseñor Adolfo Armando Uriona, presidirá la misa.
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La parroquia y santuario de Sampacho, en la diócesis de Villa de la Concepción del Río Cuarto, se prepara para los festejos por el centenario de la declaración de Nuestra Señora de la Consolata como patrona de esa ciudad cordobesa, que firmó el 28 de abril de 1915 el papa Benedicto XV.

El lunes 27 de abril se hará la vigilia de oración y canto a María. A las 21 saldrá la imagen de la Virgen desde el Camarín, ubicado frente al altar mayor del templo. A las 22 se expondrá el Santísimo Sacramento para su adoración y la oración-musical será guiada por el presbítero Juan Carlos Lisa, párroco de
Santa María Teresa Goretti, de Río Cuarto. Habrá un tiempo para confesiones. A las 23.30, oración y consagración de los niños del pueblo a María. Entrega de la medalla conmemorativa de "La Consolata" a cada niño que se consagre a la Virgen. Animación musical para prepararse para la celebración festiva mariana con la animación del Ministerio de Música del santuario.

El martes 28, tras el repique de campanas a la hora cero, se le cantará el Feliz Cumpleaños a La Consolata.

A partir de la 1 habrá hora de oración coordinada por distintos equipos e instituciones parroquiales, y a las 16 será la solemne procesión con la imagen mayor de La Consolta, tras la cual el obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, monseñor Adolfo Armando Uriona, presidirá la misa.

Además de entonarse el Himno Nacional Argentino, habrá palabras alusivas, expresiones hacia La Consolata de integrantes de la comunidad parroquial, se descubrirá una placa conmemorativa que bendecirá el obispo y actuará el Coro Polifónico "Delfino Quírici", de la ciudad de Río Cuarto. También habrá un concierto mariano por el centenario.

Historia
Aunque la devoción a la Virgen de La Consolata arribó a Sampacho en 1905, diez años después se la declara Patrona del Pueblo de Sampacho, quedando atrás el patronazgo anterior de los Santos Ángeles Custodios.

El hecho de que el sur de Córdoba pudiera conocer la advocación de la Virgen de La Consolata, nace con la llegada el 9 de julio de 1905 desde Turín (Italia), de quien fue el segundo párroco de Sampacho, el presbítero Juan Mauricio Cinotto, motor e impulsor de esta devoción.

El sacerdote trajo consigo una réplica del cuadro milagroso que se venera en Turín. Por esos años la mayoría de los colonos eran de origen italiano por lo que el párroco en las misas rezadas en latín pronunciaba sus homilías en italiano y en castellano. En 1911 se produce la llegada de la gran imagen de La Consolata, obra de madera creada por los hermanos Borgogno, de la misma ciudad de Turín, la cual tiene un peso superior a los 1.300 kilogramos y es portada por más de 30 hombres.

La llegada de la imagen de la Virgen cambió los sentimientos de aquellos colonos, quienes se sentían protegidos y consolados lejos de su tierra por esta devoción.

El 28 de abril de 1915, por pedido del mismo sacerdote, Benedicto XV declaró a La Consolata, Patrona del Pueblo de Sampacho.

El padre Juan Cinotto, sin perder la línea invariable del hombre capacitado para realizar una misión superior, despertando energías sin escatimar esfuerzos acarició dulcemente un anhelo que a la vuelta de algunos años convertiría en realidad: construir un templo que fuera el orgullo de la región en especial de los sampachenses ayudado de algunos feligreses, juntando centavos tras centavos, transformó la capilla en un hermoso y elegante santuario que luego albergaría a la Santísima Madre de Dios bajo el suave nombre de Consoladora. Pero al lado de lo material, sus obras espirituales han sido numerosas y de gran importancia para el crecimiento de la fe en el pueblo.+